Nace un nuevo método de fisioterapia revolucionaria, funcional y terapéutica: Fisioyoga

El fisioyoga es un método de ejercicio funcional y terapéutico que se utiliza en fisioterapia que tiene como pilares fundamentales mejorar la movilidad, la fuerza y el equilibrio de cada uno de sus pacientes, teniendo siempre presentes la consciencia, integración y activación del core y el suelo pélvico.

En este sentido cabe destacar que el «método fisioyoga, un método de fisioterapia que tiene como base fundamental el movimiento consciente y la respiración, para ello fusiona conceptos y herramientas de: control y aprendizaje motor, ejercicio terapéutico, entrenamiento funcional y yoga.

El fisioyoga se basa en un trabajo corporal donde la autopercepción de la postura de nuestro cuerpo es fundamental. Esta consciencia del movimiento se consigue gracias a la unión del movimiento con la respiración.

Así, en este método el trabajo respiratorio es esencial porque tiene una doble finalidad, por un lado, se consiguen los efectos fisiológicos de una respiración eficiente como son la mejora de la dinámica pulmonar, trabajo del diafragma, suelo pélvico y core, entre otros.

Por otro lado, las técnicas de respiración, junto a otras de relajación, meditación y mindfulness que se utilizan en el método fisioyoga ayudan a trabajar nuestra mente, a centrarnos en el aquí y el ahora.

Obteniendo otros muchos beneficios derivados de una respiración consciente, como la calma, mejora de la memoria, disminución del estrés, etc., que cada uno de nuestros pacientes agradecen mucho

Además el método fisioyoga se adapta a cada paciente, da igual la condición física previa de la persona, ya sea adulto o niño, si hay algún tipo de patología o no, porque en todos los casos se lleva a cabo una valoración previa individual que a los fisioterapeutas que llevan a cabo este método les permite marcar unos objetivos claros y así adecuar cada uno de los ejercicios y posturas a cada paciente.

Así que podemos afirmar que el método fisioyoga siempre se adapta a la persona y no la persona al método como sucede en otras disciplinas.

Por ello, es un método de movimiento ideal para cualquier paciente que pueda presentar algún tipo de dolor o patología ostemuscular, como por ejemplo dolor lumbar, problemas de cuello, dolor de rodilla, patologías de hombro o caderas, inestabilidad de tobillo, y un largo etcétera.